En posicionamiento SEO sabemos que el dominio es uno de los elementos más importantes. Es por ello por lo que intentamos que tengan palabras clave relevantes para nuestra estrategia, en la medida de lo posible.
Normalmente esto conduce a dominios que tienen un nombre comercial y una keyword relacionada. Nos da más opciones para posicionarnos, sobre todo en búsquedas de palabras clave locales, pero mantener nuestra identidad corporativa. Es un complemento SEO muy útil.
Sin embargo, hay un nivel por encima de este tipo de dominios, el de los dominios TLD.
Qué son los dominios TLD
Los dominios TLD tienen estas siglas porque representan el término Top Level Domain, lo que significa que es un dominio de máximo nivel. Estamos por tanto por dominios que tienen las palabras clave exactas para salir los primeros en búsquedas muy generalizadas. Sería hablar de millones de visitas en muchas ocasiones.
Un dominio TLD no es barato y, de hecho, los gestores de dominios ya han identificado su valor, por lo que incluso aunque estén sin dueño sigue siendo una inversión importante.
Aprovechar los dominios TLD en SEO
Los dominios TLD tienen un alto potencial SEO. Pero hay que trabajarlo. El dominio nos ofrecerá el trampolín perfecto hacia cualquier keyword secundaria que queramos posicionar en relación a la principal.
Esto también nos obliga a trabajar los contenidos interiores de la página web. Si bien no necesitaremos tanto esfuerzo para conseguir el posicionamiento SEO, no debemos perder el motivo comercial por el que lo hemos adquirido.
Los dominios TLD deben ir además acompañados de una estrategia social efectiva, con lo que intentemos copar los primeros resultados de toda la página del buscador. De conseguirlo, podríamos obtener visitas constantes hacia nuestro negocio o medio, con la potencial rentabilidad que esto representa.
Estrategias SEO no recomendadas en dominios TLD
Los dominios TLD son de gran efectividad, pero no son comodines sin riesgo con los que el éxito esté garantizado.
Por eso debemos huir de ciertas estrategias SEO no recomendadas para estos dominios, como por ejemplo, las redirecciones. Muchas empresas compran dominios TLD para redirigir hacia la web corporativa. No servirá más que de protección frente a la competencia.
Otra estrategia errónea es no escoger la extensión de dominio adecuada. En negocios locales, la extensión nacional es la más importante. En negocios internacionales, si el .com se rechaza por cualquier motivo, las extensiones personalizadas que incluyan más keywords, son las más recomendables.