La optimización SEO no tiene unas reglas escritas oficiales, pero los profesionales hemos podido identificar qué factores son los más decisivos en la preparación de una página web para mejorar sus posibilidades en el posicionamiento.
Muchas de estas reglas no escritas son conocidas por la inmensa mayoría de usuarios desarrolladores y responsables de un website, sin embargo siguen cometiéndose sorprendentemente algunos errores comunes que afectan a esta optimización SEO:
La dirección principal de la web
Pese a que todo el mundo es consciente de la importancia del dominio, no parece que encaje en el hábito común configurar los dos parámetros de una url, con www y sin ellas, lo que sin querer motiva una gran cantidad de errores de entrada de usuarios, así como problemas con el robot de indexación para una identificación adecuada de qué modalidad debe priorizar,
Las imágenes no redimensionadas
Como la mayoría de entornos digitales actualmente redimensionan las imágenes para adaptarlas al diseño del website o a la visualización según el dispositivo, se cree que esta redimensión es una optimización de la imagen, pero no es así.
Optimizar las imágenes es adecuarlas por tamaño a cada diseño, de manera que el sistema operativo tenga que realizar el mínimo o ningún ajuste sobre ello. De tener que hacerlo, la redimensión implica un aumento en la carga de la página, así como también en su peso y, por extensión, un problema de optimización.
Elementos no enlazables
La tendencia a diseños one page está provocando el olvido de ciertas reglas básicas de optimización, siendo una de las más antiguas que todo elemento debe generar una acción por parte del usuario. Esta regla debería haberse potenciado con el desarrollo de dispositivos móviles y pantallas táctiles, pero no ha sido así, generando experiencias de usuario poco apropiadas.
La regla que mencionamos indica que todo lo posible debe enlazarse, imágenes, títulos, enlaces propios dentro del texto. Con ello fomentamos una red de enlaces, principio básico sobre el que se construye Internet, la navegación por más páginas, el incremento del número de páginas vistas y una mejor indexación de los robots de búsqueda.
Protección del dominio
La protección del dominio implica la contratación de extensiones adicionales a nuestra url principal, ya sea de idioma o identificativos. Teóricamente su contratación se realiza con el fin de evitar que la competencia pueda quitarnos el dominio, pero también es un elemento básico de optimización SEO.
La protección de dominio nos sirve en este ámbito para una estrategia de posicionamiento SEO por países, así como para evitar que se produzcan rebotes por errores en la entrada.