El posicionamiento SEO tiene como objetivo principal para casi todas las empresas el aumento de sus ventas.
Conseguir una buena posición por palabras clave principales, puede ofrecer este efecto de una manera muy efectiva.
Sin embargo, el posicionamiento SEO obtenido no solo puede ofrecernos ventajas económicas directas, sino también otras que pueden aportarnos un gran valor incluso más allá del monetario.
Reconocimiento de la empresa
El hecho de salir en las primeras posiciones en relación a un producto, a un servicio o a información especializada, ofrece a la empresa un reconocimiento por parte de los usuarios en un doble sentido.
Primero un reconocimiento por un buen trabajo publicitario, dado que hoy en día el posicionamiento SEO no se obtiene por casualidad, sino que requiere una estrategia por detrás muy bien trabajada.
Por otro lado, el reconocimiento por la calidad del contenido digital ofrecido por parte de la empresa, que en muchas ocasiones servirá como branding indirecto para potenciales clientes.
Ocultar a la competencia
Hay un elemento estratégico clave en obtener un buen posicionamiento SEO. La posición que ocupa tu empresa, no la ocupa la competencia. Por tanto, cuantas más posiciones consigas ocupar, sobre todo por palabras clave principales, menos posiciones estará aprovechando la competencia.
A veces se consiguen más beneficios por el mero hecho de que los rivales no consiguen tantas ventas, lo que te confiere un ventaja competitiva incluso sin tener que vender más.
En posicionamiento SEO la clave está en consolidar las posiciones, de forma que sea más difícil para la competencia conseguir alcanzarte y, mucho más todavía, desbancar la posición que has obtenido.
Posibilidad de inversiones alternativas
El posicionamiento SEO requiere inversión de recursos, tiempo y conocimiento. Al principio puede ser bastante importante y los resultados se obtienen muchas veces a largo plazo.
Sin embargo, una vez alcanzados es posible mantenerlos con menor inversión, dedicando el sobrante o incluso algo más, para trazar estrategias alternativas que aumentarán nuestros beneficios.
Podemos, por ejemplo, enfocar nuestro interés hacia un posicionamiento SEO diferente, con el que abordar nuevas palabras clave.
De igual forma podemos escoger invertir en otros ámbitos de la publicidad online. Si con el posicionamiento SEO hay determinados términos que no hemos conseguido abordar, es posible que con la publicidad patrocinada (SEM) obtengamos los resultados que queremos en muy poco tiempo.
La complementariedad de estas estrategias, puede ayudarnos a mejorar de forma global nuestro marketing online.