Google ha trabajado muy duro últimamente para mejorar de forma considerable su algoritmo y por tanto los resultados de búsqueda de cara al usuario. Actualmente sólo se habla del nuevo algoritmo colibrí, pero esto se trata de un cambio en la forma de entender a los usuarios por parte del motor de búsqueda de Google. Si hasta ahora todo iba bien, no tendrías porque preocuparte.
Analizando los cambios de algoritmo
Sin embargo, hubo unos cambios en el algoritmo que sí afectaron drásticamente a muchas webs y que muchas de ellas lo siguen sufriendo. El primero de estos cambios llegó con Panda, que se centró en penalizar sobre todo el contenido duplicado y de muy baja calidad como textos excesivamente cortos o cuya repetición de palabras clave era excesivamente exagerado.
Sin lugar a dudas, esta modificación del algoritmo supuso una caída de tráfico muy importante para muchas webs, que aunque tal vez no habían copiado contenido, sí que contaban con textos excesivamente cortos y no se preocupaban demasiado de la elaboración de contenido de calidad.
El golpe fuerte llegó con la primera versión de Penguin y posteriormente con su perfeccionamiento en Penguin 2.0. Esta modificación de algoritmo fue la más crítica sin lugar a dudas pues se dedicó a penalizar los enlaces de mala calidad. Aquellos SEO’s que se dedicaron a colocar enlaces por todos sitios, en directorios y granjas, que enlazaron millones de veces a la misma palabra clave o que realizaron una compra masiva de ellos vieron como de repente, su tráfico se desplomaba al ser penalizados por Google cayendo en el ostracismo del buscador.
Después de estos dos cambios muchos temblaban con la aparición de Hummingbird pero la verdad es que si hasta el momento estabas haciendo las cosas bien no tienes por qué preocuparte. De hecho el nuevo algoritmo es más una evolución del buscador de como muestra los resultados que un nuevo poli malo.