El posicionamiento SEO significa la posición de una página web en los resultados de búsqueda en base a una palabra clave concreta. Este posicionamiento puede ser mejor o peor, las variables son considerables (más de 200 por url) y van evolucionando en importancia e implicación conforme Google lo considera necesario.
Una de estas importantísimas variables se relaciona con la antigüedad de la web, es decir, con la presencia online de la misma, si es una página recién publicada, rediseñada o incluso migrada a un nuevo servidor.
Una nueva página web
La página web que parte de cero contará con todas las ventajas posibles del posicionamiento SEO básico. Esto implica que no se verá afectada por ninguna acción anterior que pudiera considerarse un posicionamiento SEO negativo, como desde hace unos pocos años Google viene considerando en base sobre todo a un linkbuilding teóricamente fraudulento.
La mayor desventaja, por supuesto, es la falta de antigüedad, uno de los factores SEO que menos se tiene en consideración, sin embargo sigue siendo uno de los más importantes. Hasta tal punto es de considerar este factor, que un dominio que data de los años 90 es suficientemente fuerte como para rediseñarse (segundo nivel) y competir con los dominios Premium del siglo XXI.
Una web rediseñada
El nivel avanzado de una página web implica el rediseño de una página web, en la que la usabilidad, la accesibilidad y la navegación en general son los principales factores a tener en cuenta.
En un rediseño web actual, la navegación del usuario y el atractivo gráfico del interfaz, constituyen los factores más importantes por los que se intenta mostrar al público una nueva página web.
En este sentido, el posicionamiento SEO siempre tiene las de ganar, pues se consigue una mayor cantidad de páginas web visitadas, un mayor tiempo de uso de la web, etc. que constituyen factores SEO determinantes.
Una nueva web
El caso más extremo lo constituye una nueva web, de renovado diseño e incluso tecnología de programación. En estos casos puede conllevar hasta el cambio de servidor, que siempre será más recomendable en el caso en que se ubique en el mismo país que la masa principal de usuarios.
Por otro lado, hay que prestar especial atención a los redireccionamientos web, que minimizarán al máximo los errores 404 y potenciarán la continuidad de uso de la página web.